Los vinos dulces elaborados con uvas pasificadas de la variedad pedro ximénez son toda una seña de identidad de la viticultura española. Y no puede ser otra que la bodega Alvear, consagrada a la elaboración de este tipo de vinos desde 1729, quien firme el PX de solera más excelso del mercado: un vino que inició su crianza en tiempos remotos y que cada año se extrae con cuentagotas. De impenetrable color caoba y textura casi petrolífera, ofrece una amplia gama de aromas –pasas, chocolate, dátiles…–y una boca suculenta y eterna que regala sensaciones difíciles de olvidar. Más que un vino, una pieza de museo.
Zarro, marca de referencia en el ámbito de la vermutería madrileña, presenta Pionera, una bebida…
Vintae presenta la nueva añada que revela el encanto de este "vino de pueblo".
Comunicadora apasionada Montse Alonso se aventura en la recuperación de viñas perdidas con su primer…
Carrascas presenta este chardonnay de nombre poético, que sorprende por su expresión elegante y compleja.