Más nos vale ir abandonando la idea de que el único espumoso español posible es el cava (catalán, casi siempre). Porque en los últimos tiempos están apareciendo vinos burbujeantes prácticamente en toda la geografía de este país: desde Cádiz hasta Galicia. Además, estos espumosos de nueva generación suelen incorporar variedades autóctonas de cada región. Gracias a ello, el amante del alegre carbónico ha podido toparse recientemente con algún brut de palomino, monastrell, ¡e incluso de albariño!
Una de las primeras bodegas que se han aventurado a aportar burbujas a la emblemática blanca de las Rias Baixas es Mar de Frades, presentando este Brut Nature que rompe moldes y abre fronteras.
Elaborado según el método tradicional champenoise, el Mar de Frades Brut Nature saca partido a la expresión fragante de la albariño, caracterizada por sus ricos matices florales y cítricos, para reinterpretar los blancos típicos de las Rias Baixas en un espumoso seco de estilo desenfadado, sin mucha complejidad pero de trago fácil y agradable.
Sin duda, otra buena noticia que aporta el cada vez más dinámico panorama vinícola de Galicia.
González Byass se suma a la tendencia de los "vinos de pasto".
La expresión menos conocida de los tintos de la Ribera del Duero.
Kweichow Moutai, el más famoso de los baijiu (aguardientes) chinos, también en España.
Las diez primeras vendimias de Lalomba, proyecto que impulsó Ramón Bilbao para exhibir sus viñedos…