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Icono de la cocina de cuaresma, sus antecedentes se remontan a los recetarios romanos donde ya aparecen los garbanzos. Esta es la receta que se popularizó en los manuales de cocina en los siglos XIX y XX.

Ingredientes

  • 600 g de garbanzos
  • 300 g de bacalao salado
  • 250 g de espinacas (frescas o congeladas)
  • 2 huevos
  • 1 cebolla grande
  • 2 rebanadas de pan duro
  • 1 cabeza de ajos
  • Aceite de oliva virgen extra
  • 1 cucharadita de pimentón dulce
  • 2 hojas de laurel
  • unas hebras de azafrán
  • sal

Preparación

El potaje de Semana Santa o de vigilia es un plato muy sencillo de preparar, nutritivo y apetitoso.

  1. La víspera, poner los garbanzos a remojo cubiertos por agua templada con una cucharadita de sal.
  2. En otro recipiente, desalar  las tajadas de bacalao, cubiertas por agua fría. Mantener en la nevera mientras dura el proceso de desalado, entre 24 y 48 horas dependiendo del grosor de las tajadas. Cambiar el agua de remojo cada ocho horas y comprobar el punto de desalado.
  3. En una cacerola grande, echar los garbanzos enjuagados y escurridos. Cubrir con agua fría y cocer junto con la cabeza de ajos lavada y entera, y las hojas de laurel. Si hubiera espinas del bacalao ponerlas a cocer junto con los garbanzos para que den sabor. Si no, se puede poner una tajada y retirarla antes de servir.
  4. Salvo que se utilice olla expres, tardarán unas dos horas en cocer. Comprobar de vez en cuando en punto y agregar agua si fuera necesario.
  5. Mientras en un cazo con agua cocer los huevos 10 minutos para que estén duros.
  6. Limpiar y trocear las espinacas si son frescas. Si son congeladas, descongelar previamente para no añadir agua al guiso, y escurrir bien.
  7. En una sartén con un  poco de aceite de oliva freír las rebanadas de pan, retirar y reservar. En el mismo aceite rehogar la cebolla pelada y picada menuda hasta que esté bien pochada. Espolvorear con el pimentón y remover rápidamente para que el pimentón no se queme y coja mal sabor.  Incorporar las rebanadas de pan frito troceadas y mojar con un poco de caldo de cocer los garbanzos, en el que se habrán desleído las hebras de azafrán, previamente calentadas en una sartén, envueltas en papel de aluminio.
  8. Cuando los garbanzos estén tiernos y con el agua justo cubriéndolos, retirar la cabeza de ajos y la hojas de laurel. Agregar el bacalao cortado en cubos de unos 3 centímetros y las espinacas y cocer unos 5 minutos.
  9. Pasar por un pasapurés o un chino el sofrito de cebolla, pan y pimentón,  y agregárselo al potaje de garbanzos.
  10. Picar el huevo cocido y esparcirlo por encima. Servir caliente.

 

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