El universo microcervecero es una fuente inagotable de sorpresas. La última llega desde Barrie, en Ontario (Canadá), donde los artesanos de la fábrica Flying Monkeys llevan ya unos años consolidando su fama de productores tan innovadores como exigentes.
Sus cervezas –que la empresa Gourpass presentó hace tres semanas en la embajada de Canadá de Madrid– se reconocen por su imagen rompedora y colorida, amén de las técnicas inusuales a las que suele recurrir el maestro Peter Chiodo para su fabricación.
Aunque muy probablemente ninguna referencia de estos monos voladores resulte tan asombrosa como El Toro Bravo, que recurre a nombre e iconografía inequívocamente taurinas para subrayar su carácter español. Porque esta imperial rye dark ale, versión 2.0 de la serie Matador, es, como bien anticipa su tipología, una cerveza oscura , de gran carácter, elaborada con centeno y cuya complejidad reside en su añejamiento en barricas fabricadas con cedro español.
Sabrosa, con fuerza, raza y generoso grado alcohólico (10,1º) –todo hay que decirlo– El Toro Bravo invita a disfrutar en la mesa de guisos potentes, carnes asadas y ahumados. El gran formato (75 cl) permite, además, beber tanto como para envalentonarse y lanzarse al ruedo, para enfrentarse con un temible miura o lo que a uno le echen.
Fiel a su espíritu innovador y disruptivo, Hendrick's rompe moldes con su nueva ginebra, inspirada…
Elaborado con la variedad airén y criado en huevos de barro, este vino naranja es…
Barceló Imperial inaugura su colección Rare Blends con un ron de doble envejecimiento, que finaliza…
Santiago Jordi presenta este interesante tinto gaditano de uva bordelesa, uno de los más singulares…
El magnífico brandy 1866 de Osborne estrena una edición especial con diseño de la sueca…
Elaborado con garnacha tinta y viura y añejado 4 años en barricas de roble francés,…