La tercera generación de la familia Cusiné que elabora vinos de calidad en una finca vinícola del Penedès cuyos orígenes se remontan al siglo XVIII presenta este amable tinto de garnacha, elaborado a partir de la fruta que crece en un viñedo situado a 616 m sobre el novel del mar. Con una corta crianza (cinco meses) en barricas nuevas de roble francés, Indígena ofrece una exuberante expresión de fruta roja silvestre, con apuntes minerales, sobre un fondo ligeramente tostado. En la boca resulta fresco y agradable, versátil sobre todo a la hora de sentarse a la mesa.
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